ARTISTAS | Por Sala NICE

Joaquín Palacios  es, ante todo, un poeta. Sus letras bailan con las cuerdas de su guitarra. Sonido limpio, sin rodeos, igual que sus versos. Sus canciones nos narran cómo es su relación con el mundo, lo que vive cada día. Habitual de Libertad 8 y la Fídula, en Madrid, tendremos la oportunidad de escuchar y ver en directo, por segunda vez en Ciudad Real, a este sevillano afincado y enamorado de su actual ciudad. En una de sus canciones de su último disco habla de una manera muy especial de ella. 

Sus dos trabajos, auto producios, son 'Sentirse azul'  e 'iMaquetando'. Acaba de estrenar una serie de cuatro videoclips grabados en el teatro de los Palacios y Villafranca. Su música es por y para todos.

Nos cuenta: "... A mi modo de ver, las canciones son las únicas protagonistas,  no quien las interpreta".

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Daniel Olivares Zarco formó parte de varios grupos. Formó su primer grupo en el año 2000, “MIL PEDAZOS”, como cantante y guitarrista. Durante los años 2001 y 2002 formó parte de un grupo de de experimentación musical en Rivas Vaciamadrid con numerosos conciertos en el Centro cultural Federico García Lorca. Durante este periodo actuó en el teatro Covivar de la misma localidad.

Participó en el 1º CONCURSO DE LA CANCION PROTESTA DE CIUDAD REAL en 1979 con la obtención del 2º puesto.  Participó en el 4º certamen de la canción de autor de Las Pedroñeras, 1980.

Participación musical en el certamen nacional de cortometrajes  en el año 2002. Madrid 

A partir del año 2003 actúo periódicamente como cantautor por distintos locales de MADRID:

EL RINCON DEL ARTE NUEVO, EL TABURETE, EL BUHO REAL, LIBERTAD, CAFÉ COLONIAL, CLAMORES…

En Cádiz: LA PEQUEÑA LULU y LA SOLEA.

En Ciudad Real: CAFÉ CONTINENTAL

 En Santiago De Cuba: SALA DOLORES (FEB 2005)

"Tras cientos de años dedicados a “otras cosas”, un pequeño accidente y su posterior inmovilidad me hicieron reencontrarme con mi vieja guitarra abandonada. Como por arte de magia comenzaron a surgir músicas y letras fruto, supongo, de las vivencias encerradas que se revolvían en mi interior. Una vez abierta esta puerta no la he podido ni querido cerrar. (Creo que las bisagras se arrancaron de cuajo) Desde entonces voy dando tumbos por pequeños escenarios compartiendo pedacitos de espejo con los que quieran mirarse en ellos. Allí junto a los fantasmas de los músicos que compartieron taburete y micro, encuentro uno de los vendavales que me empuja por los derroteros de la expresión".